y nunca nadie sabe nunca nada, para colmo

18 septiembre 2006

Silencio en la pista, todo está en calma

No sólo de deportes vive el hombre, pero en este 2006 difícil será despegar de la pantalla a los fanáticos del deporte. Y es que, a pesar de que ha pasado el furor (y posterior desazón) que supo provocar el Mundial de Fútbol en Alemania, aun restan desarollarse numerosos eventos mundiales que tendrán como protagonista a representativos albicelestes.

En esta ocasión, la disciplina que nos convoca y nos invita a ilusionarnos, sufrir y romper con la rutina es el básquetbol. Su comienzo es inminente, y tanto es así que, el 19 de agosto próximo se da inicio al XV Campeonato Mundial de Básquetbol FIBA, con sede en Japón. La presente edición tendrá a Argentina entre los principales candidatos al título (campeón olímpico en Atenas 2004 y subcampeón mundial en Indianápolis 2002) junto con Estados Unidos y España.

Por otra parte, no debería de sorprender a nadie que equipos como el de Brasil (con Leandrinho y Anderson en la NBA), Grecia y Lituania den ese salto de calidad esperado y confirmen su buen momento obteniendo un lugar en el podio. El crecimiento global del nivel basquetbolístico, a partir del desarrollo de las diversas ligas, y las ansias de EE.UU. por recuperar el prestigio perdido en competiciones internacionales, harán de este evento el más competitivo y entretenido de los últimos años.

En síntesis, el camino para llegar a los puestos de vanguardia en la cita mundialista se vislumbra arduo y de pronóstico reservado como pocas veces antes. Sin embargo, numerosos medios internacionales coinciden en señalar a nuestra selección como una de las favoritas al título. Es hora de reconfirmar el nombre y el respeto que Argentina ha sabido ganarse. Las condiciones están dadas, sólo resta dejar correr el tiempo.